Saludos apreciados lectores. Antes de adentrarme en mi perspectiva sobre la actualidad de la salsa en la hermosa ciudad de Málaga, quisiera aclarar que mi opinión proviene de mi experiencia como profesor, promotor, entusiasta y co-fundador del movimiento salsero en esta localidad. Aquellos de nosotros que genuinamente amamos y promovemos el arte de la salsa, nunca traicionaríamos su profundo significado en las culturas antiguas y contemporáneas. Desde mi niñez, observé a mis padres bailar con pasión, pero fue en la adultez que comprendí que en Cuba, la salsa es más que un simple baile; es un estilo de vida arraigado.
Os invito a quienes no están familiarizados con la cultura cubana a investigar el origen y la razón de ser de la salsa, que en sus inicios se conocía como "son". En aquellos tiempos, los movimientos de salsa no eran tan intrincados ni los desplazamientos tan largos como en la actualidad. El baile era más contenido en movimientos y la postura de los bailarines era elegante. Sin embargo, como en todas las manifestaciones humanas, la salsa también evolucionó, y en ese proceso de evolución agradezco al destino por su influencia, ya que en esa época, el swing, el jazz, el blues y otros ritmos sabrosos se entremezclaban en las pistas de baile.
Todo esto que relato tiene el propósito de establecer un trasfondo, una base desde la cual percibo el mundo de la salsa desde mi nacimiento. Desde que empecé a nutrir este movimiento en Málaga en el lejano 1999, he sido testigo de su progreso y cambio. Cuando llegué a esta ciudad, ya existía una pequeña comunidad salsera, aunque reducida debido a las circunstancias de la época. A pesar de ello, la pasión y las pequeñas fiestas salseras ya florecían en algunos rincones malagueños.
Es esencial destacar a Pilar y Jorge, dos de los pioneros que dieron forma al Movimiento Salsero en Málaga. Aunque en sus inicios carecían de una profunda comprensión de la cultura cubana, impartían clases y promovían la salsa con entusiasmo. También recordamos a Alberto Guerrero, el primer DJ de salsa en la ciudad, quien con su música inspiró a muchos a dar sus primeros pasos en este mundo.
Imagen del picaro de la habana 1999 con Deiby Tum Tum, Julio Volcan, Ariel Murillo, German Simon
En el año 2021, Ariel Murillo y yo, Deiby Tum Tum, unimos fuerzas como animadores y relaciones públicas para elevar la salsa a nuevas alturas. Nuestra propuesta ganó popularidad rápidamente y se esparció por Málaga, presentando un enfoque fresco gracias al toque peculiar de unos cubanos apasionados. A partir de ahí, el movimiento salsero creció exponencialmente en Málaga, incluso sin el respaldo tecnológico actual. El fenómeno fue tal que hasta políticos se dejaron llevar por la magia del "El Pícaro de La Habana", nuestro local en la calle Granada.
Basado en mi profunda experiencia y en testimonios de salseros que han abrazado el auténtico espíritu de la salsa, llego a la conclusión de que, si bien el movimiento salsero en Málaga ha crecido en términos de participación, ha perdido en cierta medida la calidad de transmitir la verdadera esencia de este baile. En este proceso de masificación, el sentimiento genuino hacia la salsa a veces se ha diluido.
Fecha: Martes, 21 de diciembre de 2021 Autor: Deiby Tum Tum