En este artículo, relataré lo que comúnmente ocurre en las clases de Salsa y Bachata en Málaga en la actualidad. También compartiré mi perspectiva como profesor y promotor desde 1999 sobre lo que considero no se aplica correctamente desde un enfoque lógico.
El movimiento salsero en Málaga ha crecido exponencialmente y ahora se extiende por toda la comarca, desde Sabinillas hasta Alameda. Existe tal cantidad de salseros y bachateros que podríamos organizar un festival con más de 10,000 personas bailando en un único lugar.
Siempre soñé con que Málaga se consolidara hasta el punto de ser reconocida por la comunidad europea como una ciudad referente en Salsa. A pesar de este avance, todavía tenemos un largo trayecto por delante. Si bien contamos con campeones mundiales de baile en nuestra ciudad, es triste observar que son reclutados por otras ciudades porque en la nuestra no se valora su talento como debería. Esta situación puede atribuirse a la falta de organización de eventos y al limitado respaldo de nuestros ayuntamientos para fomentar el baile en general.
Dada la popularidad del baile y su impacto económico positivo, muchas personas sin la formación o experiencia adecuada han decidido incursionar en la enseñanza. Lamentablemente, a menudo lo hacen con conceptos equivocados. El baile, sin importar el género, fue creado para nutrir el alma y promover el bienestar interno. Si introducimos la codicia en esta ecuación, formaremos a bailarines que danzan sin pasión y con el espíritu dañado. Quienes realmente entienden el propósito del baile no pueden tolerar esto.
Actualmente, se ofrecen numerosas clases de salsa y bachata sin el conocimiento correcto, llevando a la población a aprender bajo métodos incorrectos y sin bases sólidas.
Es esencial que estos instructores comprendan que la salsa surgió para estrechar lazos sociales y conectar a la humanidad. Además, más que un simple baile, brinda innumerables beneficios para la salud. Por tanto, si su propósito es humanizar, ¿qué es lo que no están captando? El mundo salsero no debería centrarse en el beneficio económico, sino en la auténtica pasión y amor hacia la comunidad.
Muchos estudiantes llegan a mis clases tras enfrentar situaciones difíciles, como una ruptura amorosa, la pérdida de un ser querido o episodios de depresión. Al sumergirse en nuestra cultura, encuentran un refugio. Por ello, insto a todos los profesores a capacitarse adecuadamente antes de enseñar bailes latinos. Como caribeños, llevamos esta tradición a Europa con la intención de llenar corazones con amor genuino.
Precisamos de instructores capacitados en toda la comarca, entusiastas por difundir nuestra cultura, pero sin olvidar la esencia que dio vida a este maravilloso género: la SALSA.
Artículo por Deiby Tum Tum,22/10/2022
Profesor de ritmos latinos
“Profesor de Salsa y cofundador en 1999 del movimiento Salsero en Málaga, enseñando Ritmos Latinos.”
Instructora de Salsa Cubana en Málaga
“Creadora de su propia Escuela de baile LiberArte en Alhaurín de la Torre”
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